Agatha Ruiz de la Prada (Madrid, 1960) estudió en la Escuela de Artes y Técnicas de la Moda de Barcelona. A los 20 años comenzó a trabajar como ayudante en el estudio madrileño del modisto Pepe Rubio. Un año después ya presenta su primera colección en el centro de diseño LOCAL de Madrid. Desde entonces Agatha ha desfilado y ha sido invitada de honor y representante de la moda española en las principales pasarelas del mundo. Las creaciones de la diseñadora se han convertido en un verdadero medio de expresión artística y desde sus primeros años en el mundo de la moda comenzó a exhibir algunas piezas maestras en galerías y museos de diferentes ciudades de Europa, América y Asia.
Estoy feliz de desfilar este año en Moda Cálida, porque considero muy valiente la decisión de la organización de seguir adelante en un momento tan complicado. Es un gesto heroico que se agradece enormemente, un impulso hacia el optimismo, hacia la vida y su celebración. La moda continúa porque nuestras fantasías continúan. De hecho esta colección es altamente fantasiosa, es una escapada a otra dimensión muy diferente a la que estamos viviendo, es un sueño de playa, de fiesta, de sol y de color. Quizás no sea mi colección más ‘ponible’, esa no es su intención. Algún día llegará el momento en el que desfilaré una colección muy comercial en Moda Cálida, pero ese día todavía no ha llegado…